UN BRONCEADO PERFECTO Y SALUDABLE.....Comencemos a prepararnos para el verano........
De las zanahorias se dice que es una de las verduras que pierde menos principios nutritivos cuando se cocina, incluso se digiere mejor. Contiene grandes cantidades de beta- caroteno, o pro vitamina A, que se convierte en tal en el organismo…por lo tanto es una de las formas más naturales de aportar vitamina A a nuestro cuerpo. El beta-caroteno es un potente antioxidante es decir que neutraliza los radicales libres, retrasando el envejecimiento y estimula los procesos inmunitarios. Es el pigmento amarillo, anaranjado típico que está presente en las frutas y verduras que tienen este color…por lo tanto es muy saludable su consumo diario.
Los Carotenos son conocidos porque favorecen la síntesis de melanina, ese pigmento de color que da lugar al bronceado y que hace de filtro natural de los rayos ultravioletas.
Por lo tanto ahora que ya estamos de cara al sol, nada mejor para proteger nuestra piel y lograr un bronceado homogéneo que incrementar el consumo de frutas y verduras con este color, en especial el consumo de zanahorias en todas sus formas…crudas: enteras o ralladas en ensaladas, cocidas: añadiéndolas a cualquier plato, cocido, salsa, minestrón o como contorno y también bebiendo el zumo directamente y combinándolo con otras frutas. Los estudios muestran que la disponibilidad de carotenos aumenta con la cocción.
Cuando mis hijas eran pequeñas “inventamos” esta receta con una amiga para que nuestros niños comieran más zanahorias…ellos la bautizaron:
CAROTENE CON PURÉ DE PATATAS:
Rehogamos una cebolla finamente picada en aceite de oliva (2 o 3 cucharadas)…agregamos 2 tazas de zanahorias ralladas gruesas hasta que estén tiernas y suelten todo el líquido, añadimos unas salchichas Frankfurt cortadas en pequeños trozos (las hay de pollo, con poca grasa y de tantas variedades)…continuamos la cocción otros 10 minutos y condimentamos. Servimos caliente encima del puré de patatas.
Hay que comenzar una dieta rica en carotenos unas semanas antes de exponerse al sol pues éste alcanza el nivel adecuado de concentración 15 días después de tomarlo. Así estaremos mejor protegidos de los rayos ultravioletas y tendremos un bronceado mas “sano”.
